
Este martes, el abogado defensor en el caso del capitán Acosta Arévalo, Alonso Medina Roa, informó que los dos funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), implicados la muerte del capitan de corbeta, fueron condenados a seis años y ocho meses de prisión sin que se tomaran en cuenta los cargos agravados por tortura.
Esta resolución se tomó luego de que el teniente Ascanio Antonio Tarascio Mejía y el sargento segundo, Estiben José Zárate Soto, admitieran su responsabilidad directa en el hecho y recibieran una rebaja de la pena de un tercio.
El abogado, en declaraciones para el portal Efecto Cocuyo, lamentó que se hayan desestimado sus alegatos para que se incorporara al proceso la acusación por tortura, medida que está establecida en instrumentos internacionales como el Protocolo de Estambul y el Protocolo de Minnesota.
De acuerdo con Roa, la versión oficial del asesinato convalidada por el Ministerio Público indica que se trató de algo parecido a un accidente involuntario, en vez de una gravísima violación de derechos humanos, que, además, corresponde a un patrón sistemático, según lo han documentado las máximas autoridades mundiales de derechos humanos, incluyendo a la alta comisionada de la ONU por los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.
“Lo único rescatable de este proceso atropellado es que tanto el Ministerio Púbico como el tribunal de la causa han admitido que los homicidas del capitán Acosta Arévalo actuaron como representantes del Estado venezolano y ello implica responsabilidad estatal por violación de derechos humanos”, indicó el abogado Medina Roa.
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