
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, aceptó la oferta de Vladimir Putin de suministrar “gratis” la vacuna contra la COVID-19 cuando esté terminada y disponible. También se ha ofrecido a vacunarse él primero públicamente, reseñó El País.
Duterte, afirmó que tenía “gran confianza en los esfuerzos desplegados por Rusia para poner fin a la pandemia. Además, creo que la vacuna que han producido es realmente buena para la humanidad. Yo Seré el primero en probarla”.
Harry Roque, portavoz de Duterte, explicó que el presidente filipino, conocido por sus polémicas salidas de tono, no bromeaba. “Es viejo. Puede sacrificar su vida por el pueblo”, dijo.
Este anuncio llega al día siguiente de que el presidente ruso, Vladimir Putin, comunicara que su país había desarrollado la “primera” vacuna contra el COVID-19 que asegura una “inmunidad duradera”.
Sin embargo, numerosos científicos occidentales mostraron su escepticismo en cuanto a la rapidez con la que se habría desarrollado.
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